Las soluciones de autenticación multifactor de WatchGuard protegen a sus activos, cuentas y usuarios. Permiten minimizar las interrupciones y la complejidad para los usuarios, además de bloquear el acceso no autorizado a información confidencial, de manera rentable y fácil de usar e implementar.
El término «autenticación de dos factores» o «autenticación sólida» no es nuevo. Comenzó a utilizarse en la década de 1990, por lo general, para designar un token de hardware que genera contraseñas de un solo uso (OTP) asociadas con una contraseña fija. De hecho, la autenticación de dos factores se refiere al uso de dos de los siguientes factores:
La evolución de la tecnología, especialmente con el uso de teléfonos inteligentes y el crecimiento del desarrollo de aplicaciones, permitió reunir más factores sin comprometer la facilidad de uso. Si se utilizan dos o más factores, el sistema se denomina autenticación multifactor (MFA).
WatchGuard AuthPoint es un buen ejemplo de MFA que se aplica utilizando cuatro factores para la autenticación. El uso de múltiples factores mejora la seguridad general de la solución, ya que ofrece protección adicional contra varios tipos de ataques, como la ingeniería social y los RAT (troyanos de acceso remoto) diseñados para clonar aplicaciones.